CEO, CSO y cofundador, y presidente, respectivamente, Vytrus Biotech y AEIC
Cada vez más mujeres apuestan por el maquillaje con SPF, una opción que no solo embellece, sino que también ofrece una capa de protección frente a los rayos solares. Pero, ¿realmente es suficiente? ¿Puede sustituir al protector solar tradicional o conviene combinar ambos productos?
En este artículo resolvemos estas dudas y te explicamos por qué incorporar productos de maquillaje con protector solar en tu rutina diaria es una excelente decisión para cuidar tu piel sin renunciar al estilo.
¿Cómo actúa el SPF en el maquillaje?
El SPF (factor de protección solar) incluido en bases, polvos, BB creams o labiales actúa de forma similar al de los protectores solares tradicionales: protege la piel de los efectos dañinos de los rayos UVB, responsables de quemaduras y envejecimiento prematuro.
Hoy en día, muchas fórmulas incluyen ingredientes como el óxido de zinc, dióxido de titanio o filtros químicos que ayudan a mantener la piel a salvo del sol mientras aportan color, cobertura y un acabado uniforme.
Ventajas del maquillaje con protector solar
Además de la comodidad de aplicar un solo producto con múltiples funciones, usar maquillaje con protector solar tiene ventajas muy interesantes:
¿Es suficiente el maquillaje con SPF?
La clave está en la cantidad. Para que un producto con SPF 30 cumpla su función, hay que aplicar una cantidad generosa (unos 2 mg por cm² de piel). Sin embargo, con el maquillaje solemos usar capas más ligeras, lo que puede reducir la eficacia del SPF. Otro aspecto importante es la frecuencia de reaplicación. Los protectores solares deben renovarse cada 2 horas, algo poco habitual con productos de maquillaje.
Entonces, ¿significa esto que no sirve? En absoluto. El maquillaje con SPF es muy útil para reforzar la protección, sobre todo si se combina con una base previa de fotoprotector o si se reaplica con polvos compactos o brumas con SPF durante el día.
¿Cuándo puede ser suficiente?
En contextos urbanos, con exposiciones solares bajas o moderadas (trayectos cortos, días nublados, interiores con luz natural), una buena base de maquillaje con protector solar puede ser suficiente, especialmente si se complementa con otros productos como polvos o sprays con SPF para retocar a lo largo del día. Eso sí, en exposiciones prolongadas al sol (playa, montaña, deporte al aire libre), lo recomendable es aplicar primero un protector solar clásico y luego el maquillaje.
El aliado perfecto para tu piel
La protección solar es fundamental durante todos los días del año. Incluir productos de maquillaje con protector solar es una forma práctica y eficaz de cuidar tu piel a diario, sin complicarte. No se trata de sustituir por completo el protector solar, sino de potenciar la protección con productos que, además, te hacen lucir bien.
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