CEO, CSO y cofundador, y presidente, respectivamente, Vytrus Biotech y AEIC
El agua micelar de Garnier se ha convertido en un elemento básico en el tocador de toda beauty lover a la hora de desmaquillarse. Gracias a la tecnología micelar de su fórmula captura las impurezas como un imán y hace que el proceso sea mucho más eficiente, rápido y sin complicaciones.
Según los expertos, se debe limpiar el rostro como mínimo dos veces al día, ya que factores como la contaminación, el sudor, el sebo o los restos de residuos de otros productos pueden obstruir el poro, impidiendo así que la piel respire correctamente y provocando puntos negros, acné o un posible envejecimiento prematuro.
Con el agua micelar se consigue una limpieza diaria integral sin irritar la piel ni deshidratarla, ya que no hace falta retirarla con agua o frotar. Se constituye como una alternativa perfecta a otros limpiadores comunes, ya que entre sus ingredientes no encontrarás jabón, que puede causar un desequilibrio del pH de la piel, y no requiere aclarado, lo que permite que los ingredientes tratantes de su fórmula permanezcan más tiempo sobre la epidermis actuando. Por todo ello se ha convertido en el aliado perfecto para mantener la piel saludable, fresca y calmada en todo tipo de casos.
Además, Garnier propone una variedad de agua micelar diferentes según la condición actual del rostro para personalizar la limpieza, aportando diferentes beneficios añadidos como nutrir, tonificar o matificar a los intrínsecos del producto.
El poder limpiador de las micelas, mínimo dos veces al día
Garnier recomienda llevar a cabo una rutina de limpieza tanto por las mañanas, para eliminar todas las células muertas a causa de la regeneración que se produce por la noche y despertar los rasgos, como por las noches para librar a la piel de los agentes que se depositan sobre ella en la jornada. De esta manera, con el agua micelar se prepara también la piel para el cuidado de tratamiento diario, permitiendo una mejor penetración del mismo.
A partir de ahí, se puede aplicar agua micelar tantas veces como se quiera sin necesidad de limitarse al ritual diario, ya que constituye un cosmético muy versátil de textura ligera y suave que se adapta a muchas situaciones. Por ejemplo, después de hacer ejercicio para eliminar el sudor o ahora con el verano próximo para refrescar el rostro dejando una sensación de suavidad e hidratación.
Por todo esto, se puede concluir que el agua micelar es uno de los productos clave en la limpieza diaria de la piel, ayudando a mejorar la calidad y apariencia de la misma.
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